Sin embargo, Florentino Pérez tenía dudas y prefirió hacer caso del criterio de Juni Calafat. El jefe de fútbol internacional insistió en el fichaje de dos brasileños. Militao ya jugaba en Europa y Rodrygo era un diamante por pulir.
Ahora son indiscutibles en la plantilla. El central llegó procedente del Oporto por 50 millones de euros y Rodry, por 45 millones, del Santos. El tiempo ha demostrado que Calafat no se equivocaba y que Florentino acertó en escucharle a él.
Lo fácil en ese momento habría sido fichar al mediático De Ligt, entonces representado por Raiola, y pelearse con los equipos top de Europa por Joao Félix. Eran dos fichajes con alto porcentaje de éxito. Sin embargo, Florentino se gastó la mitad por los cariocas y, a día de hoy, son mejores futbolistas.
Piezas clave
La proyección de ambos es tremenda y prueba de ello es que hace unos meses renovaron sus respectivos contratos. Tienen mucha culpa de la última Champions que conquistó el Real Madrid. La edición de ambos, desde octavos, fue sobresaliente.
Calafat no ha dejado de ascender con Florentino Pérez. Ahora lidera un equipo de trabajo que le ayudan a seguir con el 'scouting' por todo el mundo. Sus grandes éxitos le respaldan (Vinicius, Valverde, Rodrygo, Militao, Camavinga...). El siguiente en su lista, y al que lleva años siguiendo, es Jude Bellingham.
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