Real Madrid se mide al Bayern de Múnich por una ida de semifinales de la Copa de Europa donde los blancos buscan dar el primer paso rumbo a la definición de Wembley. La conexión entre Vinicius y Toni Kroos abre la contienda tras un arreón inicial más que imponente por parte del local.
Previa marcada por todo lo ocurrido a lo largo de las últimas semanas tanto en Europa como en un campeonato nacional de Liga que se acerca para los hombres de Carlo Ancelotti.
Hoy tocaba medirse ante un rival más que conocido en una nueva edición de ese clásico a nivel de Champions que por supuesto siempre genera expectativas tanto por el Allianz arena como en un Santiago Bernabéu que espera ya por el partido de vuelta.
El conjunto blanco sabía que no se medía a la mejor versión a nivel nacional de un Bayern Múnich que nuevamente después de 11 años no será campeón en su tierra.
Distinta es la historia cuando el equipo de Baviera se mete en una Copa de Europa en la cual es lo más parecido en cuanto al Real Madrid se refiere. Partido de gigantes y donde igualmente se ven las caras dos clubes que en muchas ocasiones parecen verse en el espejo reflejados. Kroos y Vinicius adelantan todo.
Gol y plan ejecutado
Tras algunos minutos de superioridad a nivel de pases y posesión el centrocampista alemán vio un hueco a la espalda de la defensa del Bayern para poner una pelota inmejorable a un Vinicius que apenas duró frente a la portería de Neuer. Gran desmarque del brasileño para abrir la contienda al sur de Alemania y todo ello con un mensaje para quien desde sus botas vuelve a adelantar a los blancos en una noche donde el balón quema.
“Si me la pones más veces, les marcamos más, gran pase, hermano…”, le dijo Vini a Kroos en esa celebración del 0-1. Una jugada que refleja perfectamente el conocimiento que tiene el conjunto de Carlo Ancelotti sobre las fortalezas y debilidades de un Bayern Múnich que pese a su dominio en el inicio del encuentro acabó cayendo en la trampa creada por brasileño y alemán.
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