El duelo entre el Real Madrid y el Bayern suponía el regreso a Múnich de Ancelotti o Kroos, el morbo de ver a Kane contra el conjunto blanco y de Davies midiéndose a los que pueden ser sus compañeros a partir de la próxima temporada.
El canadiense no jugó como titular, ha perdido el sitio en las últimas semanas, pero sí que saltó al césped en la segunda mitad, y pudo jugar los minutos finales, aunque no tuvo muchas oportunidades de entrar en contacto con el esférico.
A pesar de ello, al acabar el partido sí que se pasó por el vestuario del Real Madrid, donde quiso volver a saludar a los merengues, algo que ya había hecho en el mismo terreno de juego, pero lo quiso hacer más tranquilo.
Una camiseta especial
Después de estar en los vestuarios, Davies se llevó una camiseta muy especial para él, la de Luka Modric. El poder llevarse un regalo como ese fue algo muy emocionante para él. “Es un honor llevarme la camiseta de una leyenda como tú”, le dijo.
El canadiense no sabe si coincidirá la próxima temporada con él, ya que su fichaje está en el aire y el croata tampoco ha renovado todavía, pese a ello, ya puede presumir de tener la camiseta de Luka, lo que sin duda fue una tremenda alegría para él.
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