Más allá de llamadas informales y contactos que no acaban llegando a buen puerto, el balear sigue siendo jugador del Real Madrid. Cuesta presentar 35 'kilos' por un jugador que será agente libre dentro de 6 meses. Ni siquiera Jorge Mendes encuentra la solución a un problema que lleva incomodando meses en los despachos de Valdebebas.
Como ya informamos en este periódico, el Real Madrid no ve ni mucho menos con malos ojos una venta de Asensio (siempre que sea en las condiciones estipuladas). El balear está más que amortizado, ya que apenas costó 3,9 millones en 2014, y lo ha ganado todo. Pero su situación contractual obliga a reaccionar.
El único escenario que no contempla la entidad es que agote su contrato y se marche sin dejar un euro en 2023. De ahí que, si Marco no encuentra salida y se compromete a seguir, haya que estudiar una renovación ventajosa para todas las partes.
Entre la espada y la pared
El futbolista desea un aumento salarial como el que ha experimentado Rodrygo en las últimas semanas. No lo ven claro en el club, pero tampoco piensan asumir el riesgo de estirar la situación y que se vaya gratis a partir del 1 de julio. Asensio no es el único caso que se le está complicando a Jorge Mendes, ahora mismo en Mánchester tratando de forzar la salida de Cristiano Ronaldo.
El verano avanza y al futbolista no le queda otra que dar un paso atrás. Ve más difícil una salida del Real Madrid y eso le obliga a llegar a un entendimiento más pronto que tarde. No obstante, todo puede cambiar si Mendes trae una oferta formal por valor de 35-40 millones de euros. Algo que, a unos pocos días de que comience agosto, aún no ha hecho posible.
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