Real Madrid y Barcelona se enfrentan este domingo en el estadio Santiago Bernabéu, en el marco de la jornada 32 de la Liga. Los hombres de Carlo Ancelotti pueden dar un buen golpe sobre el tablero y dejar sentenciado, prácticamente, el campeonato doméstico. La diferencia actual entre ambos conjuntos es de ocho puntos para los madridistas.
Los merengues, en un momento dulce, afrontan este encuentro luego de eliminar al Manchester City de los cuartos de final de la Liga de Campeones en una eliminatoria ajustadísima que se decidió en la tanda de penaltis en el Etihad. Por su parte, el Barcelona ha sido eliminado a manos del PSG y, salvo milagro, la temporada de los de Xavi Hernández acabará en blanco, que no de blanco.
Así, uno de los duelos más apasionantes de este Clásico será el que concierne a Jude Bellingham y Robert Lewandowski en la pelea por el ‘pichichi’. El inglés parte con ventaja respecto al delantero azulgrana, puesto que Jude ha marcado, hasta el momento, 16 goles mientras que el polaco tiene en su haber 13 tantos. Sin embargo, es el ucraniano Artem Dovbyk, delantero del Girona, el que acumula más dianas, con un total de 17.
Bellingham, que ya fue trascendental en el Clásico de la primera vuelta en Barcelona con un ‘doblete’, primero con un golazo desde fuera del área y luego con un tanto sobre la bocina rematando un pase de Luka Modric, ha sorprendido a propios y extraños por su capacidad goleadora durante el primer tramo de la campaña, si bien es cierto que en este 2024 ha disminuido su efectividad de cara a la portería. No obstante, el británico sigue dando recitales allá por donde juega y, sin ir más lejos, este miércoles en Mánchester lo volvió a dejar claro, con un control de balón previo al gol de Rodrygo que nos recordó, por momentos, al mismísimo Zinedine Zidane.
El ex del Borussia Dortmund, que llegó el verano anterior al Santiago Bernabéu por unos 100 millones de euros rechazando propuestas que le mejoraban considerablemente la oferta del Real Madrid, se ha ganado al público merengue con un liderazgo impropio en un chaval de apenas 20 años y, siendo centrocampista, ha roto casi todos los registros en su primera temporada como blanco, con unas cifras -en cuanto a goles- simplemente espectacular. Ahora, quiere ir a por el ‘pichichi’ y, para tal misión, no quiere líos con Lewandowski, su homólogo en el eterno rival.
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