El Real Madrid tuvo, hasta ahora, el partido más importante de la temporada y lo solventó en otra lección de pundonor, orgullo y coraje. Los blancos ya están en la gran final de Wembley tras remontar al Bayern (2-1) en el Santiago Bernabéu.
No hubo novedades respecto a la alineación de Carlo Ancelotti. Repitieron los mismos que jugaron, la semana pasada, en el Allianz Arena (2-2).
En el ataque, Bellingham, Rodrygo y Vinicius tiraron del carro, en un encuentro en el que los de Ancelotti llevaron la batuta durante casi todo el partido, a diferencia de lo que pasó en Múnich.
En este sentido, Rodrygo estuvo activo por la banda derecha, su posición típica. Aunque lejos de su primer nivel.
Al inicio del segundo tiempo, tuvo una ocasión donde Neuer apareció, como casi todo el partido. También tuvo una falta, obligando al meta a realizar una gran estirada para bloquear el disparo. Finalmente, a falta de diez minutos, el brasileño fue sustituido por Brahim.
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