El Real Madrid está pensando en el presente, pero también en el futuro, más allá de que Xabi Alonso no quiere distracciones antes de recibir al Osasuna en el estadio Santiago Bernabéu.
El tolosarra entiende que sus jugadores deben recuperar la competitividad perdida y pelear por todos los títulos en juego, algo sobre lo que habló en su presentación.
"La exigencia en el Real Madrid es máxima y hay que aceptar el reto, pero es uno muy bonito. Podemos hacer cosas que enciendan a la gente, que ilusionen al madridismo y generen ese orgullo que es intrínseco en el Real Madrid y en su afición. Y a eso venimos. Yo, mi staff y con la gente que está aquí, seguro que todos tendremos esa energía para dar el impulso que necesitamos", aseguró el técnico vasco en rueda de prensa.
Esto explica que Florentino Pérez y José Ángel Sánchez estén pensando en el verano de 2026, momento en el que reforzarán la plantilla y se le dirá adiós a dos pesos pesados del vestuario blanco.
Adiós a Rüdiger y a Alaba
Hace pocos meses, el Real Madrid, en la búsqueda de renovar la plantilla, despidió a Luka Modric y a Lucas Vázquez, por lo que en este plan, los próximos serán David Alaba y Antonio Rüdiger.
Los dos centrales madridistas terminan su contrato el próximo 30 de junio de 2026 y desde el club blanco no les ofrecerán la renovación, según hemos podido conocer en Defensa Central.
De esta forma, Xabi Alonso cuenta para el futuro con Dean Huijsen y Raúl Asencio, a la espera de que Eder Militao recupere su mejor versión y deje atrás definitivamente las dos lesiones de rodilla.
Esto explica el fuerte interés del Real Madrid en hacerse con los servicios de Ibrahima Konaté, quien llegaría gratis el próximo verano, siempre que no renueve su vínculo contractual con el Liverpool.