El Real Madrid jugará este sábado, en el Santiago Bernabéu, la tercera jornada de Liga ante el Mallorca (21.30 horas) y el equipo se ha vuelto a ejercitar esta mañana en Valdebebas para continuar preparando el que será el último partido de agosto. Después, llegará el primer ‘parón’ de selecciones, pero Xabi Alonso ya ha llegado a la conclusión, en sintonía con todo su ‘staff’, de que no puede machacar a sus futbolistas durante todo el año, por lo que debe también planificar descansos para sus pupilos. Empezando por Aurelién Tchouameni.
El objetivo de Alonso, que ha introducido modificaciones notables a la hora de entrenar el físico con sus jugadores, consiste en no llegar al final del curso destrozado en este punto. De esta manera, lo que se busca es empezar a rotar en el centro del campo en cuanto entre en juego Eduardo Camavinga, que sufrió hace dos semanas un esguince y aún no hay noticias del ‘6’, que sufrió varios contratiempos ya la campaña pasada y se perdió la mitad de los partidos. El jugador ha trabajado por su cuenta este verano para revertir esta situación.
“Necesito a todos... y no quiero sobrecargar a ningún jugador”, es la frase que Xabi no se cansa de pronunciar en Valdebebas, según fuentes autorizadas le han señalado a Defensa Central. En este sentido, la amplitud de plantilla, el tener un buen fondo de armario y la dosificación de minutos es clave para alcanzar un año tranquilo, sin incidentes y respetando absolutamente la integridad física y psíquicas de los futbolistas, que ya el último año el primer equipo superó con creces los 60 partidos.
Tchouameni es uno de los jugadores considerado clave en el Madrid. El galo, discutido durante gran parte de la campaña anterior, es indiscutible para Alonso, como se pudo observar en el Mundial de Clubes y este arranque de temporada, al igual que con Carlo Ancelotti. El italiano se convirtió en su principal defensor cuando las críticas sobrepasaron cualquier tipo de límite, incluyendo aquí a parte de un Santiago Bernabéu totalmente frustrado y desquiciado que fue cómplice, como cada siempre, de las campañas que se orquestan por los más antis y las que intentan camuflar bajo un falsario…
Tchouameni, imprescindible
Tchouameni ha pasado de ser criticado a ser imprescindible en el Madrid. Con 25 años, el ‘14’ puede consolidarse en el que será su cuarto curso en Chamartín. De momento, el último encuentro de los merengues en Oviedo (0-3) le confirma como una pieza esencial en el esquema del equipo, siendo una máquina en la recuperación del balón (se llevó nueve de un total de 11 intentados) y también destacó en el juego aéreo. Sólo Dean Huijsen le superó en los balones robados y fue el que, de igual modo, lideró las intercepciones de pases (5).
Así pues, Alonso busca ‘proteger’ a un Tchouameni en modo todoterreno, presentando una gran versatilidad, al poder jugar como tercer central o pivote defensivo. Eso dependerá de la “flexibilidad” del sistema que tanto le gusta decir a Xabi, que tiene muy presente que se equivocó con Aurelién, al haber presionado tanto al Madrid con el fichaje de Martín Zubimendi, como hemos explicado ya en este diario.