El Real Madrid no pierde de vista a Eduardo Camavinga. Cuando parecía que el parón internacional del mes de marzo terminaría sin ningún problema físico para los pupilos de Carlo Ancelotti, el ‘12’ francés caía lesionado por un esguince en el tobillo. Después de que las alarmas saltaran en Valdebebas, una reevaluación del problema ha dejado más tranquilo al entrenador italiano.
Por el momento, el cuerpo técnico pide paciencia con Camavinga. Tanto es así que ni siquiera ha estado presente en la sesión con el grupo celebrada esta misma mañana en la Ciudad Deportiva, un indicativo de que se le está cuidando al máximo para que no haya ningún contratiempo y pueda estar disponible para los planes del míster de Reggiolo cuanto antes.
Las sensaciones son mucho mejores que hace solo dos días: la lesión de Eduardo Camavinga habría decrecido en gravedad con el avance de las horas hasta el punto de que estaría preparado para regresar a los entrenamientos con el grupo. Si nada cambia en estas últimas horas, el stopper galo estará entrenando con el resto de sus compañeros en la sesión que Ancelotti ha programado para mañana viernes 29 de marzo.
Veremos
El daño que recibió en su tobillo, jugando el último partido del parón con Francia, preocupó mucho a los responsables de la planificación deportiva: no es la primera vez esta temporada que Camavinga regresa de una concentración con el combinado nacional galo lesionado. Ya ocurrió durante el mes de noviembre, una baja muy sensible para Ancelotti que afortunadamente tenía solución.
Pese a todo, en Valdebebas contienen la respiración: saben que cualquier mal movimiento podría ser fatal para el tobillo de Eduardo Camavinga. Por eso le han ordenado que guarde reposo y no se presente al entrenamiento que Carlo Ancelotti ha dirigido esta mañana en la Ciudad Deportiva: no estaban seguros de si hoy podría ser capaz de resistir tales esfuerzos. Mañana, con una visión más optimista, no habría ningún problema.
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