No ha empezado bien el Real Madrid el encuentro de esta noche en Atenas y el Olympiacos ha olido la sangre demasiado pronto, ya que los helenos se han adelantado con un golazo de Chiquinho en el inicio del partido. Algo que ha enfadado sobremanera a Xabi Alonso, que está siguiendo del duelo desde el área técnica con rostro muy serio, más aún cuando los locales se adelantaron en el marcador. El tolosarra está viendo cómo se repiten nuevamente errores de los últimos choques.
Y, en concreto, a Xabi no le está gustando ver cómo el rival está combinando fácil en la frontal, con muchos jugadores que acuden contemplativos, mirando, y sin ninguna intervención activa. Fede Valverde se quedó parado en la acción del gol, no siguió a uno de sus jugadores y los cruces de Aurelién Tchouameni o Raúl Asencio fueron muy blandos para evitar la pared. “Otra vez lo mismo, no nos pueden jugar tan fácil”, comentaba Alonso con los componentes de su cuerpo técnico, mientras el estadio Georgios Karaiskakis rugía como una auténtica olla a presión.
Al Real Madrid le crecen los enanos.
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) November 26, 2025
El golazo de 𝐂𝐡𝐢𝐪𝐮𝐢𝐧𝐡𝐨.#UCL #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/nTZkSVoUkS
El Olympiacos ha empezado con una presión muy alta el encuentro, con muchos nervios en el Madrid, que no ha sabido madurar el partido. Los de José Luis Mendilibar han empezado en modo arrolladores y, a las primeras de cambio, se han adelantado en la tablilla. Ha sido con una jugada al primer toque entre Podence, El Kaabi y Chiquinho, que ha finalizado éste con un derechazo seco y potente, que ha ido muy ajustado al plao y de poco ha servido la estirada debajo de Andriy Lunin.
Mbappé, al rescate
Poco ha durado la alegría en El Pireo. El Madrid, con un Kylian Mbappé imparable, ha anotado un ‘hat-trick’ en siete minutos y ha sentenciado el duelo al marcharse al descanso. Vinicius Junior también se ha marcado una gran exhibición y el brasileño ha marcado un gol, pero fue anulado.