El mercado de pases de este verano entra en su fase final y desde las oficinas de Valdebebas no parecen haber previsto ninguna contratación más. Eso sí, están pendientes a las hipotéticas salidas desde el vestuario del Santiago Bernabéu con nombres tan recurrentes como Dani Ceballos o Rodrygo Goes.
Al margen de esos jugadores que podrían salir de la disciplina deportiva blanca, la tesorería blanca sigue de cerca la posibilidad de recibir un suculento ingreso de aproximadamente 30 millones de euros. Fruto de la política de desarrollo de jóvenes talentos establecida por la junta directiva, el Real Madrid ha dejado marchar a múltiples jugadores a la élite futbolística europea. Uno de los ejemplos más claros es Miguel Gutiérrez, vendido al Girona con el 50% de sus derechos de pase.
Ahora que el '3' madrileño está preparándose para marchar al SSC Napoli, el club blanco recibirá la mitad del tránsfer pagado al cuadro radicado en Montilivi. Una operación idéntica llevaría esos 30 millones de euros hasta las cuentas de la entidad presidida por Florentino Pérez. El pagador no sería otro que su gran rival capitalino: el Atlético de Madrid.
Interés beneficioso
En sus intentos por reconstruir la plantilla al mando de Diego Pablo Simeone, la dirección deportiva colchonera ha efectuado múltiples contrataciones durante el verano de 2025. La mayoría de esos traspasos han satisfecho las principales reclamaciones tácticas del 'Cholo', pero todavía quedaría una última petición: Takefusa Kubo. Los intentos por encontrar un atacante de primera línea, que supla la baja de Ángel Correa, no se han terminado.
Por eso en la zona noble del Riyadh Air Metropolitano interesa tanto la contratación de un atacante tan versátil como es el '14' de la Real Sociedad. Si bien Takefusa Kubo pertenece a la escuadra txuri-urdin, el Real Madrid se ha reservado durante todo este tiempo el 50% de los derechos de su próximo pase. Por su parte, los mandamases liderados por Jokin Aperribay solo están dispuestos a dejarle marchar en caso de que el equipo interesado abone su cláusula de rescisión.

El Real Madrid espera
La voluntad de los ejecutivos vascos es muy clara: Take Kubo solo abandonará el Reale Arena mediante el desembolso de 60 millones de euros. La mitad de todo ese dinero, en virtud de un acuerdo que se extinguiría en el mismo momento de su aplicación, recalaría en las arcas del Santiago Bernabéu: 30 millones de euros. Gracias a esa estrategia, el club blanco ingresaría un notable monto de dinero por no hacer 'nada'.
Este fichaje pondría fin a cualquier opción de que Takefusa Kubo regrese al vestuario del Santiago Bernabéu en el futuro. El futbolista nipón, siguiendo un camino similar al de Reinier Jesús, no encontró sitio en el Real Madrid nada más llegar a la capital de España. A diferencia del atacante verdeamarelo, el centrodelantero japonés se hizo hueco en la Real Sociedad y desde entonces no ha abandonado la disciplina vasca.