El Real Madrid tiene un importante compromiso en el Estadio de la Cerámica después de su victoria contra el Atlético de Madrid en octavos de final de Champions League. El complicado partido contra los pupilos de Diego Pablo Simeone se convirtió en un encuentro agotador para el que apenas han tenido tiempo de recuperación.
Sea como fuere, los jugadores del Real Madrid ya están buscando los tres puntos enfrentándose al Villarreal en un partido que siempre deja ciertos momentos de tensión. Porque la visita al Estadio de la Cerámica es una salida complicada para la disciplina deportiva merengue debido a la dificultad que entraña enfrentarse al 'submarino amarillo' en su propio estadio.
Al mismo tiempo, un incidente ocurrido hace dos temporadas ha puesto todos los focos en dos jugadores, cada uno de un equipo: Fede Valverde y Álex Baena. El cruce que ambos tuvieron en el Real Madrid-Villarreal de la temporada 22/23 fue realmente notorio debido a las acusaciones del centrocampista del Villarreal. Álex Baena denunció a Fede Valverde por una supuesta agresión a la salida del partido.
Recuerdos
La investigación judicial que prosiguió a aquella denuncia terminó desestimando la causa debido a la falta de pruebas concluyentes que soportasen la versión defendida por el mediocentro levantino. El incidente tanto dentro como fuera del terreno de juego madridista se gestó después de unas desafortunadísimas palabras del jugador español.
"Llora ahora que tu hijo no va a nacer", le dijo Álex Baena a Fede Valverde en mitad del partido. Aquellas palabras hirieron al entonces '15' madridista: su mujer, Mina Bonino, estuvo a punto de perder al hijo que entonces estaban esperando. Ahora ese pequeño, llamado Bautista, es uno más de la familia Valverde y disfruta junto a su hermano Benicio de la vida que tiene por delante.
Mirando hacia delante
A pesar de la historia que tienen ambos centrocampistas detrás, Fede Valverde y Álex Baena parecen haber olvidado lo ocurrido en aquel partido. Como el resto de sus compañeros, estuvieron más que correctos y tuvieron el mismo gesto el uno para el otro. Chocando la mano como si fueran un jugador más, ambos mediocentros no prestaron atención a todo lo ocurrido en anteriores temporadas.
No así la afición reunida en el Estadio de la Cerámica. Cada vez que Fede Valverde recibe el balón, por mínimo contacto que sea, el '8' uruguayo recibe una pitada por parte de los seguidores del 'submarino amarillo' reunidos en el estadio situado en Castellón. Los seguidores del Villarreal, a diferencia de los jugadores de ambos equipos y de Alex Baena y Fede Valverde, mantienen el recuerdo de este roce entre ambos futbolistas.