En la última edición de la Copa del Rey MAPFRE, el Rey Felipe VI volvió a apostar por un accesorio que no se pierde ni una: su reloj. Se trata del Bvlgari Octo Ultranero, un reloj de lujo que lleva especialmente para sus días en alta mar.
Pero ojo, no es un simple reloj para dar la hora. Este modelo combina elegancia con mucha funcionalidad. Salió al mercado en 2016 con un precio cercano a los 7.000 euros, aunque hoy se puede encontrar de segunda mano entre 3.000 y 4.000 euros.
Diseño y resistencia, lo que importa en el mar
El Octo Ultranero tiene una caja de acero con un tratamiento especial llamado DLC (Diamond Like Carbon). ¿Qué quiere decir eso? Pues que el acabado negro mate aguanta golpes y arañazos como pocos relojes. La caja mide 41 mm, un tamaño que no es ni muy grande ni pequeño. Justo para que se note sin exagerar.

La esfera es negra y tiene detalles en rojo o azul (depende del modelo): las agujas y los índices. Esto hace que sea fácil leer la hora incluso con poca luz. Además, el cristal de zafiro protege el reloj contra rayones, algo imprescindible cuando estás en el mar.
Y sí, el reloj es resistente al agua hasta 50 metros. Perfecto para las regatas. La correa de caucho es cómoda y práctica, porque en el mar la humedad está siempre presente.
Un reloj que habla de su estilo
Felipe VI no es de mostrar relojes llamativos. Este Bvlgari refleja bien ese estilo sobrio y práctico que mantiene desde que es rey, en 2014.
Aunque este es su reloj favorito para navegar, tiene otros en su colección. Por ejemplo, un Omega Speedmaster Professional para actos oficiales, y un Rolex Datejust para eventos formales.

No es raro que muchos monarcas elijan relojes de calidad. Pero en su caso, siempre busca estilo, funcionalidad y discreción.