El Real Madrid perdió la final de la Copa del Rey ante un Barcelona que supo aprovechar los errores blancos para ganar el título. De hecho, dos de los tres goles culés vienen por fallos individuales del Real Madrid. El segundo, que lleva la firma de Ferrán Torres, se produjo por una falta de entendimiento entre Rüdiger y Courtois. El portero belga, junto con Llopis, no ha tardado en analizar lo ocurrido en la jugada.
Courtois era consciente de que Rüdiger estaba jugando al límite de su físico y, por eso, no se sintió seguro al ver a su compañero tener que correr a la espalda con Ferran y, por eso, él decidió estar fuera de posición para intentar atacar ese balón, consciente de que el central alemán estaba muy mermado físicamente y que no podía aguantar carreras con los rivales. Sin embargo, Courtois terminó llegando tarde y el resto de la historia ya la conocemos.
Lo cierto es que Rüdiger jugó parte de la final muy tocado, algo que se pudo ver en la acción del segundo gol del Barcelona. Si hubiera estado en buenas condiciones, Courtois está convencido que la acción se hubiera resuelto de otra manera. No obstante, ya no hay que lamentarse y hay que mirar hacia delante. Es el momento de digerir la derrota lo mejor posible para afrontar los últimos cinco partidos de liga.
"Muy orgulloso de mis compañeros y de como hemos luchado por una victoria que no ha llegado. Triste y responsable, pero convencido de que nos levantaremos", afirmó el portero belga tras perder la final de la Copa del Rey. Eso sí, poco hay que reprochar a un Courtois que está siendo de lo poco salvable esta temporada. Poco ha podido hacer para evitar que el equipo cayera en Champions y Copa.
"El partido estaba bajo control y en un balón a la espalda el partido se ha complicado", así analizó Carlo Ancelotti el empate del Barcelona cuando el título estaba más cerca que nunca. Una pena visto lo visto en la segunda mitad, donde el Real Madrid fue muy superior a un FC Barcelona que aprovechó es balón al espacio entre Rüdiger y Courtois para llevar el partido a la prórroga.
Se intentó
El Real Madrid plantó cara y demostró que no está tan lejos del FC Barcelona; solo faltaba hacer un planteamiento valiente y creer que es posible. Sin embargo, el buen juego del equipo en la segunda mitad y en la prórroga no fue suficiente ante un equipo que mostró un mejor tono físico en los últimos minutos.
Noche triste para el madridismo y para un Courtois que se siente ciertamente responsable de la acción que lo cambia todo. No obstante, el belga puede estar tranquilo porque siempre saca la cara por el equipo en los peores momentos. Ahora toca apoyar al equipo en los cinco últimos partidos de liga. La figura de Courtois será fundamental, y no es para menos, es el mejor portero del mundo.