En el Madrid sienten que esta semana de vacaciones le puede servir a Vinicius para olvidarse del enfado por los pitos que se llevó del Bernabéu en el último partido y hacer las paces con el madridismo. De hecho, este martes hay entrenamiento a puerta abierta, donde estará lleno de aficionados merengues, y allí tendrá contacto con todos ellos. Firmará autógrafos y se dará ese baño de masas que, seguramente, termine por hacerle olvidar el calentón que le hizo cambiar su foto de perfil en redes.
En estas vacaciones ha disfrutado con amigos y seres queridos en la playa y la piscina. También ha aprovechado para callar las bocas de los que han dicho en redes que no está en forma física en comparación a otras temporadas. Por eso, ha subido varias publicaciones mostrando su tableta definida. De esta forma, quiere acabar con cualquier rumor o puesta en duda de su profesionalidad.
La foto que ha subido Vinicius a su cuenta de Instagram que parece ser en modo de respuesta a los que dicen que está en peor estado de forma.
— Alexis Rodríguez (@Alexis_RH_) December 28, 2025
Dudar de la profesionalidad del brasileño creo que, cuanto menos, es absurdo. pic.twitter.com/Qdrl7LA8oE
Quiere volver a brillar
Aunque esté enfadado y decepcionado, Vinícius Júnior sigue teniendo el objetivo de triunfar en el mejor club del mundo. Es feliz en el Real Madrid y todavía tiene 25 años, es joven para pensar en marcharse de la élite europea. Todavía puede ganar muchos más trofeos colectivos e individual y tener una carrera brillante. Después, ya tendrá tiempo para ganar más dinero en una liga exótica.
Antes de pensar en su renovación, lo primero que tiene que hacer el jugador es recuperar su mejor versión. Lleva muchos meses rindiendo a un nivel mucho más bajo del habitual y el equipo le necesita. No puede ser que Kylian Mbappé le saque una diferencia de goles tan abultada, y sobre todo cuando el 7 también ha tenido bastantes ocasiones para anotar.
Todos le quieren
En el fondo, aunque haya decepción, en el madridismo se tiene un gran cariño a Vinícius Júnior, porque llegó aquí con 18 años y se ha formado como futbolista. También ha madurado como persona y se le ha defendido siempre de las críticas y juicios externos. Por eso mismo, el brasileño no puede ver en la afición a un enemigo, sino todo lo contrario.
Aquí se le quiere y respeta, pero se quiere ver intensidad, actitud y su talento. Y estas cosas hace tiempo que no se ven como antes. Es algo que el jugador debería reflexionar, porque tiene nivel para ser uno de los mejores del mundo y demostrarlo cada vez que salta al campo.