El Real Madrid ha arrancado la Youth League de la mejor manera posible, con una victoria ante el Olympique de Marsella (3-2) en Valdebebas y con una remontada al más puro estilo del club blanco. Remontar está en el ADN del Madrid desde las categorías inferiores y así lo han demostrado los chavales de Julián López, dando la vuelta a un marcador adverso hasta en 2 ocasiones para acabar sumando los 3 primeros puntos de la competición.
Los goles de Roberto Martín y de Barroso dieron la vuelta al marcador en los instantes finales al partido, en el que los blancos tuvieron que sudar la gota gorda para conseguir la victoria. El juvenil madridista se vio por detrás en el marcador justo al borde del descanso, en un tanto de esos que hacen mucho daño.
Los franceses se adelantaron en el añadido de la primera mitad con un contragolpe letal, un mazazo psicológico del que los blancos se repusieron muy bien en la reanudación. La falta de acierto durante los primeros 45 minutos penalizaba al Real Madrid, que se veía por detrás sin merecerlo pero que en ningún momento se vio perdido.
Roberto Martín y Barroso revolucionan el partido
Y es que en la segunda mitad el equipo continuó desplegando un buen fútbol y generando ocasiones. Tanto va el cántaro a la fuente que no tardaron los merengues en encontrar el gol. La entrada de Barroso al partido primero, y más tarde de Roberto Martín, llevaron al equipo a otro nivel y en el minuto 60 un centro de Liberto que remató Barroso acababa en el empate, empujado al fondo de la red por un defensor rival de forma inesperada tras el rechazo del portero. Un gol surrealista pero que daba aire al equipo blanco.
El Marsella tampoco se descompuso con el gol encajado y su buena segunda mitad encontró premio en el 1-2. Corría el minuto 73, pero la alegría no les duró ni 10 minutos. Los que tardó el Real Madrid en empatar por medio de Roberto Martín, después de que el árbitro anulara también un gol a Barroso por un fuera de juego muy ajustado.
Finalmente, en el 86 llegaba el gol de la victoria para el Real Madrid desde el punto de penalti, tras una mano clarísima en un lanzamiento de falta de los blancos. El defensor del Marsella evitó que la bola fuera a portería desplegando el brazo de forma muy extraña, y el colegiado no dudó en indicar el punto fatídico. Barroso no falló desde los once metros y el Real Madrid suma una victoria que es oro puro.
Buena imagen y mejor resultado, una combinación perfecta para comenzar con las mejores sensaciones posibles el asalto a la Champions de los juveniles, una competición que los blancos solo han conquistado en una ocasión, con Raúl en la 2019-20. Esta temporada quieren volver a ganarla después de 5 años para demostrar por qué La Fábrica es considerada por muchos la mejor cantera del mundo del fútbol.