El Real Madrid busca un cambio de dinámica después de 3 partidos de forma consecutiva sin conseguir la victoria. Sin embargo, hay rituales que algunos jugadores no parecen dispuestos a cambiar. Es el caso de Jude Bellingham, que una vez más saltó al césped nada más llegar al estadio.
Antes de pasar por el vestuario para cambiarse y saltar a entrenar, quiso comprobar el estado del verde, como siempre hace. No fue el único ya que son varios los jugadores que saltaron al estadio Georgios Karaiskakis. Y las sensaciones que tuvieron es que el duelo contra Olympiacos no iba a correr el riesgo por el césped.
Los jugadores, con Bellingham como principal baluarte, quisieron tocarlo y parparlo para sentirlo por primera vez. Las sensaciones generales entre los futbolistas del Real Madrid eran positivas sobre el estado del terreno de juego. “Está bien”, era el comentario más repetido entre los madridistas que han salido al verde.
Además, también han podido comprobar de primera mano el ambiente que les espera en el Olympiacos – Real Madrid. Y es que los jugadores llevaban ya desde las siete de la tarde llenando las gradas para animar a su equipo. Desde dos horas antes del inicio del encuentro ya había cánticos en el fondo, lo que han comprobado los jugadores blancos.
Una primera toma de contacto para los jugadores del Real Madrid
Lo cierto es que, si normalmente Bellingham y sus compañeros saltan al césped, parecía obligatorio este miércoles. Y es que como ya hicieron en Anfield, Xabi Alonso tomó la decisión de no entrenar ayer martes en el estadio de Olympiacos. Prefirió hacerlo en Valdebebas, donde podía preparar mejor el partido.
Es algo habitual en sus equipos y que el Real Madrid estrenó en la jornada anterior de Champions frente al Liverpool. En esta ocasión esperan que les de más suerte y que consigan los 3 puntos para regresar a la senda de las victorias. Sobre todo tras los partidos ante los red, Rayo Vallecano y Elche.
El inicio a ese camino hacia el triunfo ha comenzado con esta comprobación del estado del césped. La primera que tenía después de no haber entrenado allí en la tarde de ayer, por lo que querían verlo. Y las sensaciones que han tenido han sido favorable para que se pueda ver un buen partido.
Un ambiente infernal para el Real Madrid
El Real Madrid no solo tendrá que hacer frente a Olympiacos, sino también a la afición del conjunto griego. Es cierto que para ellos es un evento que les visite 18 años después el rey de Europa. Pero sueñan con dar la campanada y conseguir la hazaña de lograr un triunfo, que sería el primero en esta Champions.
Y es que los de Mendilibar llegan después de empatar dos encuentros y perder los otros dos, por lo que no conocen la victoria. Además, solo han sido capaces de marcar dos goles, por lo que los merengues no deberían sufrir en defensa. Pero la presión que llegará desde las gradas los jugadores ya lo han podido comprobar.