El Real Madrid ha disputado esta noche la tercera jornada de la Women’s Champions League en el estadio Alfredo Di Stéfano ante el París FC y ha cosechado un empate (1-1) que sabe a algo más después de que las blancas firmaran su gol, obra de Caroline Weir, en el minuto 98. Las galas se adelantaron en la primera parte por un penalti, que transformó Azzaro. El cuadro local suma siete puntos de nueve posibles en Europa.
Un intenso inicio de partido marcó la toma de contacto del Madrid y el París. Las merengues tuvieron más ocasiones en el primer tramo del duelo y, en una de ellas, Linda Caicedo pudo adelantar al equipo de Pau Quesada. Sin embargo, el travesaño lo impidió y poco a poco las francesas fueron metiéndose de lleno en el encuentro, con buenos minutos finales y terminaron adelantándose por un penalti de Angeldahl, que derribó a Scott en el área.

Fue Azzaro la que logró engañar a Misa Rodríguez para adelantar al París, justo en el momento que estaban siendo superiores las francesas. La delantera definió sin problemas el lanzamiento desde los once metros y hundió al Madrid, aunque el tanto, que llegó en el minuto 40, lejos estuvo de llegar en los últimos momentos del primer tiempo. El encuentro se calentó, con un recital de cartulinas amarillas para las locales, y se jugaron 15 minutos de añadido.
Weir obra el milagro
Con una segunda parte igualada, en un partido de ida y vuelta, el Madrid contó con varias ocasiones para lograr, al menos, el empate. Pero éste no llegó hasta la última jugada, cuando Weir aprovechó un balón que quedó suelto en el área para colocar en la tablilla el 1-1 definitivo. Las de Quesada, que llevaban cuatro partidos consecutivos ganando, acumulan ya 13 encuentros seguidos sin perder y miran ya al Clásico liguero del próximo sábado contra el Barça (16 horas), que se disputará en el estadio Johan Cruyff.