Decíamos hace semanas que el Barcelona no levantaba cabeza con las obras del Spotify Camp Nou -así es como se le ha rebautizado al estadio azulgrana- y la historia continúa, aunque no sabemos si, fieles a la máxima de Groucho Marx, como tragedia o farsa. Más bien, como un componente de ambas, porque el ridículo del Barça con su recinto está más vivo que nunca, sobre todo después de las imágenes que hemos podido ver gracias al ‘youtuber’ Ferran Barniol en la que, entre otras cosas, se puede observar cómo una rata campa a sus anchas.
Merced a un vídeo que ya se ha viralizado en las redes sociales, vemos cómo ‘avanzan’ las obras y, durante el mismo, varios roedores aparecen entre las herramientas y el diferente material que se está empleando en las obras del Camp Nou. Las imágenes han sido tomadas, por lo que parece, en el sector donde se habilitará el área VIP, junto al túnel de vestuarios. Hablamos, pues, de una de las mejores zonas del estadio y observar en ellas algunas ratas no es de recibo, por ser suaves.
Y todavia alguien se explica por que no les dan permisos para el Camp Nou, ni habiendolo arreglado se libran de las ratas.@10JoseAlvarez @elchiringuitotv @Siempreblaugra @gerardromero @jotajordi13 @VikingBlancoRM
— Jesús Gómez (@jesusillo2) September 14, 2025
Imagenes del canal de Youtube: "Ferran Barniol" pic.twitter.com/2hO23OTcqB
Por lo que ha podido saber Defensa Central, no está confirmado si se ha empleado Inteligencia Artificial (IA) detrás o no, pero en redes se ha armado el escándalo con la última novedad de un Camp Nou que, ‘a priori’, iba a estar disponible para la temporada pasada. La entidad que preside Joan Laporta ha decidido jugar al despiste y engañar a todos, siempre con la aquiescencia de los organismos rectores de nuestro fútbol, pero lo cierto es que el final de la profunda remodelación del estadio ni está ni se le espera. Al menos, en el corto plazo.
El Barça intentó hasta el último segundo jugar su primer partido de la presente edición de la Liga en su recinto, pero no pudo reunir los permisos oportunos al respecto y el encuentro del domingo ante el Valencia (6-0) se tuvo que disputar en el Joyan Cruyff, que apenas tiene capacidad para 6.000 espectadores. Es la primera vez que se autoriza en nuestro campeonato doméstico algo similar, no contabilizando a todos aquellos equipos modestos que, por razón de presupuesto, no pueden contar con unas mejores instalaciones.
Un Camp Nou decadente
Aunque las obras del Camp Nou empezaron en la temporada 2022/2023, empezando a derribar el antiguo recinto durante los meses de noviembre y diciembre, coincidiendo con el Mundial que entonces se celebraba en Catar, el Barça no ha dejado de recibir malas noticias con la profunda reforma de su estadio. Y no es nada halagüeño para un club que tiene en esta obra, por una parte, un intento de modernizar su campo y, por otro, buscar ingresos en el futuro para levantar unas cuentas que, desde hace tiempo ya, están en quiebra técnica.
Las últimas -y dantescas- imágenes con estas ratas escenifican, pues, el estadio comatoso de un equipo que si bien es cierto que ganó la Liga y la Copa el año pasado, empezando a ver la luz al final del túnel, en el aspecto institucional suspende con nota. Son las consecuencias de haberse endeudado con contratos de otra galaxia -véase el caso de Lionel Messi- y de haber sobrevivido de palanca en palanca durante los últimos ejercicios contables, consiguiendo vender activos e hipotecando futuros ingresos para obtener liquidez de inmediato.