Si algo se puede decir del deporte, y de la vida en general, es que hay muchas cosas que suceden que realmente no esperamos ni en nuestros peores sueños. Fue algo similar lo que sucedió hace dos años, cuando Guillermo Gustavo Willy Hernangómez fichó por el Barça después de su paso por la NBA. El pívot dejó el New Orleans Pelicans y la oferta de los culés le convenció para volver a Europa.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y Willy, en una entrevista reciente que ha tenido en el pódcast ‘La Bombilla’, ha explicado por qué se decantó por el Barça cuando su deseo era regresar al Real Madrid, que contaba con sus derechos en la ACB, pero no igualó la oferta presentada por los culés. Entonces el cuadro blanco tenía en la misma posición a jugadores como Walter Tavares y Vincent Poirier.
“Yo soy de la cantera del Real Madrid y me hubiera gustado que las cosas hubieran salido diferentes, pero en ese momento quizás era un mal ‘timming’ de poder ir al Real Madrid. Además, la oferta que me hicieron era como si no hubiera y yo quería jugar, sentirme importante. El Barça apostó por mí, Barcelona es una ciudad increíble”, ha confesado Willy, al que le resta aún un año de contrato con los azulgranas. El pívot, sin embargo, podría retornar al Madrid de la mano de Sergio Scariolo, el seleccionador nacional.
“Acepto todas las críticas y me resbalan la mitad. Solo me importan de la gente que sabe, como el entrenador, el cuerpo técnico, mis compañeros o mi familia. El resto no han tenido mi carrera y no tienen ni idea”, ha reconocido Hernangómez, cuando ha hablado sobre su actual situación con el Barça, donde no está teniendo los minutos esperados, reconociendo que este último año ha habido una fuerte tensión en el vestuario.
Terapia ante el bajón
Willy Hernangómez no esquivó ninguna pregunta incómoda en ‘La Bombilla’ y ha reconocido haberlo pasado mal durante estos últimos meses, hasta el punto de sufrir un bajón emocional importante y tener que recurrir a terapia con especialista. “Tuve un momento complicado de perder el amor y la pasión por el baloncesto esta última temporada. No me sentía feliz ni a gusto con lo que estaba haciendo”, ha admitido el internacional con la Selección española.
“Iba a entrenar porque era lo que tocaba, intentaba encontrar la manera, pero llega un momento en el que tú solo no puedes ni sabes. Hablé con mi familia y gente cercana para buscar ayuda y empezar a trabajar las emociones y la salud mental, que es muy importante. Me ha venido muy bien, he vuelto a conectar mi cabeza, saber lo que quieres y no quieres y eso es la hostia. No he pedido ayuda al club, lo he hecho por mi cuenta”, ha agregado.