El Real Madrid pierde al desanso contra el Girona (1-0) y el encuentro, que supera ya la media hora, se ha acabado rompiendo en los últimos minutos. A pesar de que los blancos llevaron la iniciativa en el primer tramo del partido, la cosa se ha ido igualando, con dos equipos muy fallones y perdiendo balones. Ha sido en los últimos minutos cuando el Madrid ha reducido el dominio con balón, aunque aun así el cuadro de Xabi Alonso está siendo muy peligroso cuando tiene espacio para seguir. Aunque el técnico tolosarra se ha mostrado enfadado por el bajón del equipo.
Concretamente, a Xabi le han sentado mal dos fallos, casi seguidos, de dos de sus jugadores, a la hora de sacar la pelota. Las pérdidas de Trent Alexander-Arnold y Aurelién Tchouameni estuvieron cerca de costarle ocasiones de mucho peligro y el entrenador se agarró un enfado monumental. “No me j…, son pases que no podemos hacer”, gritó el entrenador del Madrid a sus futbolistas. Ambos, eso sí, pidieron perdón por sus groseros errores.
Tuvo varias ocasiones el Madrid, pero ni Kylian Mbappé ni Vinicius Junior han podido golpear. Para colmo, Éder Militao ha tenido un remate que se ha ido rozando el larguero en el minuto 38. Posteriormente, Mbappé marcó un gol, pero fue anulado, al tocar previamente el balón con la mano. Los merengues se habían reanimado en el final del primer tiempo, pero al descanso ha llegado el tanto del Girona. Azzedine Ounahi, con un golazo, ha puesto por delante a los locales tras un contragolpe en el que el marroquí ha golpeado con el interior de primeras al balón al recibirlo. El tanto, eso sí, ha subido a la tablilla con polémica, porque antes puede haber habido un penalti sobre Mbappé.
Toca levantarse
Después de una primera parte con muchas ocasiones y errores por parte del Girona y el Madrid, son los de Míchel los que se marchan al descanso con ventaja. Los visitantes no estuvieron del todo mal, pero no llegó a inquietar a la zaga rival. Los catalanes defendieron bien en bloque bajo y apenas sufrieron en ataque estático del Madrid, aunque en las transiciones se le vieron las costuras a los de Montilivi. El gol de Ounahi pone en aprietos a los de Xabi, que suman dos ‘pinchazos’ seguidos en Liga frente a Rayo Vallecano (0-0) y Elche (2-2).
El Madrid está obligado a levantarse y remontar otro encuentro que se le tuerce a la hora de marcharse a los vestuarios. Hay que recordar que ahora mismo es el Barça el que encabeza la clasificación liguera, con 34 puntos, mientras que los merengues cuentan con dos marcas menos. Sólo vale el triunfo para ser nuevamente líderes ante una semana, la próxima, cargada en el torneo doméstico: el miércoles toca visitar San Mamés para enfrentarse al Athletic Club (19 horas), mientras que el domingo el equipo volverá a jugar en el Santiago Bernabéu más de un mes después, recibiendo al Celta (21 horas).