Dos días después de hacerse con su Decimoquinta Copa de Europa, el Real Madrid anunció de manera oficial el fichaje de Kylian Mbappé, que ha firmado con el club blanco hasta 2029.
La contratación del astro galo ponía fin a un culebrón que se prolongó en el tiempo, puesto que desde hace veranos el jugador siempre ha estado en la órbita del Madrid.
Sin embargo, desde Francia, la marcha del capitán de ‘Les Bleus’ sigue sin digerirse y en el entorno del PSG dura la situación de enfado con el futbolista, que ha denunciado que tuvo varias amenazas de manera “violenta” por parte de la entidad que preside Nasser Al-Khelaifi.
En el París habrían planeado una prórroga del contrato de Mbappé por un año más, una opción que se contemplaba en su último contrato firmado con el club parisino, para así, de cara al año próximo, haber cerrado un traspaso del jugador al Real Madrid por unos 180 millones de euros, que es lo que desembolsó el PSG al Mónaco en el verano de 2017 por el crack de Bondy.
No obstante, fue el propio Mbappé el que se negó a seguir en París una temporada más, según avanza ‘Le 10 Sport’, sosteniendo que siete campañas han sido más que suficientes para seguir en Francia.
El jugador piensa que ha puesto todo de su parte durante estos años, pero este verano ya le tocaba poder elegir, algo que ha acabado sucediendo, para suerte del Real Madrid.
La salida de Mbappé del PSG no ha sido, desde luego, la mejor posible. Estos días atrás, conocíamos que el futbolista ha demandado a su antiguo club, exigiéndole la friolera cifra de 100 millones de euros por incumplimiento de contrato. Una petición en la que, además, tiene el apoyo total del Madrid, que ya está estudiando cuándo será presentado ante el Santiago Bernabéu en un acontecimiento que, en Concha Espina, califican de “histórico”.
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