Si hay un nombre que no deja de aparecer en la información en clave Real Madrid durante este verano es Rodrygo Goes. El '11' verdeamarelo ha perdido protagonismo, así como el puesto de titularísimo e intransferible, desde los últimos meses de la campaña 24/25. La llegada de Xabi Alonso, aunque anticipaba algún cambio, solo ha confirmado esa tendencia negativa.
Su escasa participación en el Mundial de Clubes, así como la imposibilidad de tener garantizado un sitio en el once inicial de gala, ha distanciado al atacante de Osasco del Real Madrid. Muchos clubes de la Premier League se acercan, según múltiples fuentes de información, para intentar un traspaso que sería multimillonario... y entraría directamente en las ventas más caras de la historia madridista.
Cristiano Ronaldo
El delantero portugués se mantiene, a día de hoy, como el jugador que más dinero dejó con su salida del Real Madrid. Después de nueve años de rendimiento impecable y una contribución intachable a la vitrina del Santiago Bernabéu, Cristiano Ronaldo se marchaba del Real Madrid en la temporada 17/18.
No logró llegar a un acuerdo con el Real Madrid para su renovación, especialmente por las diferencias en cuanto al salario, y solicitó formalmente su salida del equipo. A pesar de que significaba perder a su mejor futbolista, el club aceptó y el Juventus de Turín logró hacerse con sus servicios pagando la friolera de 117 millones de euros.
Ángel di María
El talentoso extremo izquierdo tuvo una brillante trayectoria en el club blanco, si bien muy corta. Brillante durante los tres años de José Mourinho en la dirección técnica del equipo, empezó a perder algo de protagonismo con Carlo Ancelotti en la temporada 13/14. El futbolista aseguró que nunca quiso salir del equipo, pero el movimiento que no tardó en fructificar en el verano posterior a la Décima.

Con su marcha al Manchester United, a mediados de 2014, el Real Madrid recibió un total de 75 millones de euros. Ese tránsfer, además de los títulos ganados, dejó un saldo positivo de 40 millones de euros al club: ficharle desde el Benfica, en verano de 2010, había costado apenas 35 millones de euros.
Casemiro
El legendario stopper brasileño fue el primero en marcharse del vestuario del Santiago Bernabéu, iniciando la desintegración de un centro del campo que dominó Europa durante casi una década. El mediocentro carioca cambió de equipo de forma tan sorprendente como repentina: cuando el Manchester United llamó a su puerta, aceptó sin dudarlo.
Ese fichaje estaba fundamentado en la búsqueda de nuevos retos competitivos, visión que respetaron desde las oficinas de Valdebebas. El traspaso hacia Old Trafford se concretó en los últimos días del mercado estival de 2022, dejando en las arcas del Santiago Bernabéu un total de 70,65 millones de euros.
Álvaro Morata
El recordado exdelantero del Real Madrid parecía estar preparado para, junto a jugadores como Dani Carvajal o Lucas Vázquez, instalarse en el primer equipo. Si bien fue parte de esa generación dorada forjada en La Fábrica, el atacante español tenía muy difícil competir con una delantera que arrasaba el planeta fútbol: la famosa BBC de Karim Benzema, Gareth Bale y Cristiano Ronaldo.

Su búsqueda de muchos más minutos y una titularidad permanente en la élite futbolística europea, para la que tenía calidad demostrada, le llevaron hasta Stamford Bridge. El Chelsea abonó, durante el mercado de verano de 2017, un total de 66 millones de euros. Su trayectoria deportiva le devolvería a España... pero esta vez del lado del Atlético de Madrid, club donde tampoco terminó de triunfar.
Mesut Özil
El talentoso mediapunta germano, de ascendencia y origen turco, es un jugador recordado con cariño por buena parte del madridismo. Su breve paso por el vestuario del Santiago Bernabéu no le impidió dejar huella durante el trienio de José Mourinho como entrenador merengue, redefiniendo el trabajo de los centrocampistas creativos en la escuadra blanca.
Se marchó durante el mercado de verano de 2013, justo después de la llegada de Carlo Ancelotti como reemplazo de Mourinho, en dirección al Arsenal. La escuadra gunner pagó 47 millones de euros por el centrocampista de 24 años, que también destacó notablemente en sus primeras temporadas en el Emirates Stadium.