El Real Madrid sabe que tendrá que romper con pronósticos y por encima de todo defensas en una final de la Copa del Rey que se acerca en el horizonte para las filas de Carlo Ancelotti. El italiano alista a sus filas para una definición que después de casi 11 ediciones vuelve a situar a sus hombres ate el rival de toda la liga. En el medio de todo esto aparece una pregunta común en este tipo de cuestiones: ¿Va a ir el Real Madrid a Cibeles si el equipo gana la Copa del Rey?
“Es verdad que en los últimos partidos hemos mostrado más solidez atrás. Nos falta un poco de más efectividad arriba. En la primera parte lo hemos hecho, pero en la segunda parte, con las contras, hay que ser más efectivo”, analizaba Ancelotti tras Getafe sobre el devenir de una final de la Copa de Rey donde sus hombres tienen por delante la posibilidad de ganar el primer trofeo de este año. Todos quieren que sea así, pero por encima de todo que pueda traer de vuelta una comunión en la plaza que por Copa no se ve en estos años.
Y es que hay un giro radical. No es menor que las últimas ocasiones donde el Madrid tuvo que ir a Sevilla o Valencia en el pasado, lo hizo en un contexto donde tenía partidos en apenas unas horas después al choque. No es un tema menor teniendo en cuenta el trajín y desgaste que este tipo de definiciones suponen, así como los coste de los operativos de control en accesos de una de las zonas más conglomeradas de toda la capital. Ahora mismo no hay dictamen oficial, pero si una luz por delante.
Valdebebas de momento no lo descarta
Y es que al no tener competición la semana que viene, hecho que no le había pasado en otras ocasiones al equipo de la capital española, el Madrid no es tan categórico como en otras ocasiones en las que sabía que no podría celebrar el trofeo. Todo esto repetimos por un escenario donde tenía partido 2 o 3 días después. Esta vez es diferente y por aun no se ha tomado la decisión final en relación con un posible festejo en la plaza de la diosa. No está tan descartado como en otras ocasiones. Sí se quiere hacer celebración institucional con Ayuntamiento y Comunidad será siempre que las agendas cuadren.
Todo empezó para quienes sean curiosos durante la década de los años 70 y 80. Un momento donde Real Madrid pasó a ser el máximo acudiente a la fuente gracias a que el Atlético apenas pudiese celebrar dos veces entre 1973 y 1985, motivo por el cual fue alejándoles de una plaza que cada vez era más blanca en cuanto al paso del tiempo se refiere. Todo terminó de consolidarse gracias a las cinco ediciones de Liga conseguidas. Así el Madrid hizo a vecinos pasar a la Plaza de Neptuno. Mañana muchos esperan que la ocasión de volver a ver a la diosa se repita.