La Champions League ya ha regresado a los calendarios de todos los equipos de la élite futbolística europea, un momento especial para el que no todos los equipos inscritos en la presente edición estarían preparados. El FC Barcelona ha sufrido una nueva inspección de su estadio, el Spotify Camp Nou, actualmente en obras. Los expertos de la entidad organizadora de la Champions League debe comprobar que todo está en orden para poder alojar allí los partidos correspondientes a la fase liga.
La inspección enviada desde las oficinas de Nyon ha elaborado los informes correspondientes con unas conclusiones que resultan demoledoras: el estadio del FC Barcelona no estaría preparado para que los pupilos de Hansi Flick reciba a la expedición liderada por Luis Enrique el próximo miércoles 1 de octubre.
Los mandamases liderados por Joan Laporta esperaban disputar ese partido de la fase liga de la Champions League en un recinto en el que se sigue trabajando a destajo para acondicionarlo cuanto antes. Pero las prórrogas ofrecidas desde el verano pasado, cuando se empezaron a poner fechas al reestreno del campo situado en Les Corts, solo han hecho que la imagen del club catalán se vea notablemente afectada.
Otro fallo más
Después de este análisis realizado por UEFA, las consecuencias más inmediatas se aprecian en la página web oficial de la propia Confederación europea. No en vano los máximos responsables de ofrecer la información sobre los partidos de Champions League han dejado claro que el encuentro entre FC Barcelona y PSG deberá disputarse en el mismo edificio que actuó como sede durante la pasada campaña: el estadio olímpico de Montjuïc, propiedad del Ayuntamiento de Barcelona.
El FC Barcelona, por tanto, mantendrá el mismo estadio local durante la totalidad de la fase liga. Esta medida fijada por UEFA, si bien es cierto que llega por el fracaso en ofrecer el Spotify Camp Nou en condiciones aceptables para la primera etapa, permite ganar tiempo a los encargados de remodelar la verdadera sede de la escuadra barcelonesa. Ese es el gran problema del FC Barcelona después de esta sentencia de UEFA.

Todavía no ha acabado
La junta directiva liderada por Joan Laporta deberá, una vez más, llegar a un acuerdo con el consistorio de la capital catalana para evitar que Montjuïc ocupe su calendario con otros eventos que interfieran en la práctica del ´futbol. Al menos hasta el próximo mes de febrero de 2026, cuando la fase liga se da por concluida y los equipos que hayan clasificado pasarán a prepararse para sus respectivas eliminatorias: dieciseisavos u octavos de final.
Tampoco será fácil transitar entre el estadio olímpico de Montjuïc y el Spotify Camp Nou, en caso de que este último recinto pueda obtener su licencia de apertura para las eliminatorias de la Champions League 25/26. La normativa de UEFA señala que "cualquier cambio de estadio entre los play-off y la fase liguera debe acordarse previamente" con la propia organización de la competición. Esta disposición del artículo 25.08 bien podría motivar otra inspección como la que el FC Barcelona ha desaprobado.