Lo que debía ser una jornada de playa y relax se ha convertido en un disgusto para muchos veraneantes en la Comunidad Valenciana. Tres playas de la comarca de La Safor han amanecido esta semana con la bandera roja izada y el acceso al baño completamente prohibido. ¿El motivo? La detección de una bacteria intestinal que ha obligado a actuar con urgencia.
Tavernes de la Valldigna, Xeraco y Daimús son las localidades afectadas por esta medida preventiva. Según han informado las autoridades autonómicas, las últimas muestras de agua recogidas en estas zonas han revelado niveles elevados de Enterococos intestinales, una bacteria que podría estar relacionada con vertidos de origen fecal.

Banderas rojas, turistas desconcertados y vecinos resignados
“Llevamos meses esperando las vacaciones, y ahora esto”, lamenta Javier, que llegó con su familia desde Zaragoza para pasar unos días en la playa de Xeraco. No es el único molesto. A pie de arena, algunos turistas no entienden por qué no pueden bañarse si el mar parece limpio. Pero los expertos insisten: aunque no se vea, el riesgo está ahí.
Los ayuntamientos actuaron rápido tras recibir el aviso de Medio Ambiente. Las playas se cerraron al momento y se desplegaron carteles y banderas rojas para informar a la población. Desde entonces, reina la resignación. “Es una pena, pero preferimos estar seguros”, dice Carmen, vecina de Daimús de toda la vida.

Mientras tanto, los análisis continúan. Los técnicos recogen muestras en distintos puntos, como el canal de Tavernes o los ríos Serpis y Vaca. Todo apunta a un problema puntual, probablemente vinculado al sistema de alcantarillado.
Esperando soluciones y mirando al cielo
Desde los ayuntamientos aseguran que están haciendo todo lo posible para reabrir las playas cuanto antes. Pero hasta que no se confirme que el agua es totalmente segura, el baño seguirá prohibido. La salud está por encima del turismo, insisten.
Este caso no es aislado. En Alicante, también se ha cerrado temporalmente la Cala Cerrada, cerca de La Zenia, por una contaminación similar.
De momento, toca esperar. Algunos aprovechan para caminar por la orilla o tomar el sol en la toalla, mirando el mar con cierta impotencia. Porque no hay nada que fastidie más en verano que tener la playa delante y no poder tocar el agua.