El Comité de Competición de la RFEF ha sancionado con 2 partidos de suspensión al entrenador del Real Madrid Castilla, Álvaro Arbeloa, tras su expulsión del pasado fin de semana en el partido del filial blanco ante el Mérida. El técnico madridista ha pagado los platos rotos del odio arbitral hacia el Castilla, patente en prácticamente todos los partidos del equipo. Frente al Mérida, volvió a quedar demostrado que los arbitrajes buscan perjudicar a los merengues y Arbeloa estalló, viendo la roja.
Fue un partido muy caliente y que acabó no solo con Arbeloa expulsado, sino también con Manuel Ángel y David Jiménez, que han sido sancionados a su vez con 3 y 1 partidos respectivamente tras la tangana final que se produjo en el estadio Romano José Fouto. El entrenador del Real Madrid Castilla quiso separar a los futbolistas de ambos conjuntos, pero acabó muy enfadado con el colegiado y diciéndole a la cara la verdad, que lo ocurrido allí fue "una vergüenza".
"Después de separar le he dicho al colegiado que había sido una vergüenza y me ha expulsado. No le he faltado al respeto ni le he dicho nada. Es muy fácil jugar contra el Castilla porque se le puede agarrar, se le puede hacer 314 faltas, que al final los que acaban con amarilla son los de blanco. Lo hemos vivido día tras día. Seguramente es más difícil que para cualquiera y no podemos luchar contra lo que tenemos enfrente ahora mismo", expresó el técnico salmantino.
Estas palabras posiblemente han contribuido a la sanción contra el entrenador del Castilla, injusta si tenemos en cuenta el rasero arbitral que sufre el filial madridista respecto a sus rivales. Sea como sea, Arbeloa no podrá sentarse en el banquillo en los partidos ante el Cacereño y el Unionistas de Salamanca.
El Real Madrid Castilla, en playoff con mucho mérito
El equipo de Arbeloa se encuentra quinto en la clasificación del grupo 1 de Primera Federación, a 4 puntos del líder, el Tenerife, a pesar de todos los elementos que tiene en contra en cada partido. El equipo ha logrado imponerse a todas las adversidades para alcanzar una situación cómoda que le permite soñar con el ascenso a Segunda.
El tiempo dirá si puede, y si le dejan, mantener el ritmo. De momento, los próximos dos partidos tendrá que solventarlos sin la presencia de su entrenador porque el árbitro de turno no quiso escuchar la verdad. Arbeloa acepta la sanción, aunque no está de acuerdo con ella. Y se mantiene en la misma tesis que comentó en Mérida, los árbitros maltratan a los chavales del Real Madrid Castilla jornada tras jornada y así es muy difícil ganar.
Pese a todo, los blancos han sumado 6 victorias en 11 partidos y se encuentran en una posición de privilegio en la clasificación. Arbeloa ya está advertido para futuras ocasiones, opinar negativamente de la labor de un árbitro le costará caro. La RFEF prefiere censurar a los profesionales en lugar de mejorar el nivel del arbitraje español.