El mercado de pases está en movimiento cada día y ahora ha sido el Barcelona el que finalmente ha cerrado fichaje.
Joan Laporta y su grupo de colaboradores han anunciado la incorporación de Joan García, aunque esta operación ha dejado mucha que desear, algo que ya no sorprende.
El ya exportero perico emitió un comunicado de despedida en el que no explica las razones de su adiós y dejó gestos que son de lamentar.
"Ha llegado el momento de separar nuestros caminos. Hoy me toca despedirme del club que ha sido mi casa desde los 15 años. Durante todo este tiempo he intentado crecer cada día como futbolista y como persona siempre con humildad, esfuerzo y siempre con el orgullo de defender la portería del Real Club Deportivo Espanyol. He dado todo lo que llevaba dentro para ayudar al equipo, para representar este escudo con la máxima entrega y para estar a la altura de lo que significa vestir esta camiseta. Sé que esta decisión no será fácil de entender para todo el mundo. No os pido que lo hagáis. Pero sí que quiero que sepáis que ha sido una decisión muy meditada", expresó el nuevo guardameta catalán

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Tras anunciar su adiós al Espanyol, Joan García cambió su imagen de perfil, esa en la que aparecía besando el escudo del Espanyol.
Esto muchos lo han considerado como un acto más de traición de quien fuera su portero hasta el final de este curso, pero que pasó más de 15 años en la entidad, lo que hace que duela aún más el comportamiento y los gestos que ha tenido en las últimas semanas y que finalmente le han llevado a fichar por el Barcelona, equipo que ha pagado más de 25 millones de euros por el guardameta.